martes, 2 de diciembre de 2008

Termas de Jahuel: Un fin de semana de lujo

Este es un post que estoy escribiendo con casi un mes de atraso, parece que el trabajo es tan intenso que no me animo a bloggear en las tardes o en fines de semana...

El hecho es que hace un mes fui con mi mujer a las Termas de Jahuel, por un fin de semana largo, a celebrar nuestro aniversario de matrimonio. Es realmente una MA-RA-VI-LLA.

Llegamos el viernes por la tarde y nos quedamos hasta el domingo en la tarde. Nos tocaron unos días de sol espectacular y en ellos aprovechamos de descansar, nadar, relajarnos, masajes, jacuzzi, caminar, comer, hacer ejercicios, todo de lujo. y solo a dos horas de Santiago. Pero vamos por partes...

En Jahuel hay una piscina exterior super agradable y grande, con instalaciones bastante cómodas a su alrededor, pero con el agua a temperatura ambiente, o sea, seamos realistas, pueden ser aguas termales, pero a esas alturas ya se enfriaron. La piscina interior, en cambio, es bastante más tibia (sin ser caliente), pero es más pequeña y con un ambiente bien cargado de humedad. Yo en realidad disfruté más la piscina exterior. Junto con la piscina interior hay un jacuzzi, con agua bieeeen caliente, que es rico, pero con harta gente ya no lo es tanto. En la piscina interior también se hacen algunas actividades como gimnasia acuática.

El gimnasio es pequeño, pero bueno, en realidad quién se escapa a Jahuel para ir al gimnasio? Lo entretenido es que tienen varias clases distintas, como stretching, pilates y abdominales, entre otras. Yo hice dos, pero no voy a decir cuáles...

Habitaciones hay de 4 clases distintas: las tradicionales (edificio antiguo), las nuevas (iguales pero en el edificio nuevo), las superiores y las de lujo. Nosotros fuimos a las nuevas y son super cómodas. Como en todo hotel, es poco el tiempo que uno pasa -despierto- en la habitación, pero esos ratos fueron super cómodos. Además, la decoración es de muy buen gusto, todo limpio y bien mantenido.

La comida, sin ser mala, diría que fue el punto débil del fin de semana. Y lo digo en serio, no es mala la comida, pero lo que me resultó disonante con la experiencia fue que los almuerzos y cenas fueran buffets. Uno espera (yo esperaba) que fuera una cena "de verdad", con la secuencia de platos servidos a la mesa, pero tres de cuatro no lo fueron. Incluso el domingo se hizo un asado campestre -también buffet- para despedir a los huéspedes del fin de semana. En ese sentido, las Termas de Cauquenes, siendo malas como termas, como restaurant son años luz mejores.

Pero retomando los pensamientos positivos, el spa también fue una delicia. Tomamos un masaje de relajación (con un apellido que no recuerdo) acompañado por la libertad de uso de las otras instalaciones del spa, básicamente un jacuzzi privado y el baño de vapor. El masaje fue, sencillamente, el mejor que me han dado.

Por último, vale la pena decir que las Termas de Jahuel están rodeadas de paisajes fantásticos. Bosques, montañas, campo, vista al valle y muchos senderos para recorrerlos a pie o en bicicleta, pudiendo observar la flora y fauna del lugar. A nosotros nos tocó clima primaveral, pero seguro que en invierno también debe ser precioso.

Iría de nuevo? Sin ninguna duda, pero primero tengo que ahorrar bastante, porque no es nada de barato. En mi caso se justifica solamente para una situación tan especial como un aniversario de matrimonio.

Más informaciones en www.jahuel.cl